El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, la Organización Internacional para las Migraciones y la Unión Europea firmaron un acuerdo para invertir 5.75 millones de euros con el fin de que personas en movilidad en México accedan a empleos formales.

A través del proyecto “Promoción de soluciones de integración sostenible para personas refugiadas, migrantes, retornadas y desplazadas en México”, el cual tiene como principal objetivo desarrollar estrategias duraderas que fomenten la integración de las personas en movilidad a través del empleo formal. Estas estrategias deben responder a las demandas del mercado laboral mexicano y promover la cohesión social, el crecimiento económico inclusivo y el desarrollo sostenible, se aseguró.

En un comunicado, se resalta que este proyecto cuenta con la colaboración de diversas entidades gubernamentales a nivel federal, estatal y local, así como del sector privado, instituciones bancarias y financieras.

Además, se destaca que dicho programa se llevará a cabo en ubicaciones estratégicas como Guanajuato, Chiapas, Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León y San Luis Potosí, ya que estas entidades tienen una presencia significativa de este grupo de personas en movilidad y cuentan con aliados comprometidos con su exitosa integración.

El proyecto contempla brindar apoyo en los procesos administrativos necesarios para lograr la integración socioeconómica, como la tramitación de la CURP o permisos de trabajo, así como el acceso a derechos básicos.

Los 5.75 millones de euros, se precisó, se erogarán durante 43 meses de implementación del programa.

Sectores involucrados

El coordinador del proyecto Alternativas de Regularización Migratoria de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Sergio Otal, enfatizó que el proyecto no se limita a colocar a las personas migrantes en un sector en particular.

La tarea principal, sostuvo, es que los documentos migratorios sean accesibles para que la población en movilidad pueda acceder a ofertas de empleo formal en diversas áreas.

El coordinador de OIM explicó que las organizaciones firmantes tienen la intención de trabajar en colaboración con el sector privado para aprovechar las oportunidades laborales existentes.

Comentó que algunas empresas de distintos sectores han expresado su necesidad de mano de obra, y buscan resolver las dudas de los empleadores respecto a la contratación de personas migrantes.

Nosotros buscamos que desde el gobierno (…) existan mecanismos y documentos que permitan a la población migrante estar de manera regular en México y que les brinden acceso al empleo formal”, afirmó en entrevista.

Además, señaló, el programa está dirigido a la población en movilidad en México, lo cual incluye a personas migrantes externas, personas que se desplazan dentro de México, población retornada a México de otros países como Estados Unidos, y personas solicitantes o beneficiarias de refugio en la República.

Sobre las entidades seleccionadas para implementar el proyecto, Sergio Otal comentó que, además de la disponibilidad de empleos y la presencia de personas migrantes en dichas regiones, se busca establecer mecanismos a nivel gubernamental que permitan a la población migrante acceder al empleo formal y regularizar su situación migratoria.

Sin embargo, el miembro de OIM explicó que el proyecto tiene una duración de 43 meses y no descarta la posibilidad de ampliarlo a otras entidades federativas en el futuro, dependiendo de las oportunidades y necesidades que surjan.

Revalidación de estudios

Por su parte, Florian Hoepfner, oficial de Soluciones Duraderas del ACNUR en México, mencionó a El Economista que para colocar a las personas en empleos se deben realizar análisis de manera individualizada, ya que algunas personas cuentan con estudios o experiencia en ciertos campos laborales.

En caso de ser necesario, dijo, se debe priorizar asuntos como la revalidación de estudios u otros temas.

Es 30.5% más que en 2022

Suman, hasta mayo, 63,462 peticiones de refugio

El número de personas que han solicitado refugio en México hasta mayo de 2023 es de 63,462, lo cual representa un aumento del 30.5% en comparación con los primeros cinco meses del año pasado, cuando se contabilizaron 48,626 solicitudes.

No obstante, el alza es de 55.95% en comparación con las 40,692 personas que solicitaron refugio en el mismo período pero del 2021.

Este año, hasta mayo, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) informó que la nacionalidad con más solicitantes de refugio es Haití, con 25,802 personas (40.65%); le sigue Honduras, con 14,391 personas (22.67%); Cuba, con 4,215 personas (6.64%); y Venezuela con 3,213 personas (5.6%), quienes están interesados en obtener asilo en México.

Por otro lado, los hondureños son la nacionalidad con el mayor número de casos resueltos de manera positiva en lo que va de 2023. De las 4,430 solicitudes resueltas, 3,923 (88.5%) han recibido una respuesta positiva por parte de la Comar.

Mientras tanto, los venezolanos ocupan el segundo lugar, con 778 respuestas positivas por parte de la dependencia, lo que representa un 86% de aceptación de 903 resueltas.

En tercer lugar se encuentran los ciudadanos de El Salvador. De las 751 solicitudes de refugio resueltas por la Comar entre enero y mayo, se han resuelto positivamente 630 (84%).